Diciembre
es un mes muy esperado por los colombianos por su alegría. Esta época es también anhelada por los más 6
millones de trabajadores que ganan el salario mínimo, pues se discute cual será el aumento del sueldo
para el nuevo año.
Los
gremios de empresarios y centrales obreras casi nunca logran ponerse de acuerdo
en cual debe ser el incremento, mientras que el Ministerio del Trabajo
interviene en esa discusión sin fijar una posición clara.
En los últimos años
de la mesa de concertación no ha podido salir un aumento conciliado y el Presidente
ha debido imponer por decreto el salario mínimo.
Desde
el año 2002, cuando el mínimo estaba en $309.000 hasta el presente año, donde
el valor ha sido de $689.455 el porcentaje de alza cada año ha sido inferior al 7 ℅,
convirtiendo a Colombia en uno de los países donde menos se incrementa el
salario básico a los trabajadores.
En
diciembre de 2015 el presidente Juan Manuel Santos decretó que para este año se
aumentaría en un 7 ℅ el mínimo, es decir
$ 45.104 mensuales ó $1.503 diarios y un 5 ℅ para el subsidio de transporte, lo
cual para los trabajadores representa muy poco si se tiene en cuenta que la
inflación no se congeló y los precios de todo subieron.“Con el salario mínimo
uno sobrevive pero no alcanza para todo lo que se debe comprar cada mes ”dice
Jeison Alexander Llanos trabajador de un establecimiento comercial quien señala
que todos los precios suben mucho más del porcentaje que aumenta el sueldo.
Los
empresarios sostienen que el incremento en el mínimo les representa un
mayor gasto, pues ellos deben asumir el
alza en la cotización de salud, pensión, riesgos profesionales y caja de
compensación de sus trabajadores, por lo que los gremios indican que a mayor valor del salario básico
menos empleos se pueden generar, situación que se podría agudizar por la ley
que obliga a que de nuevo se paguen horas extras.
Comerciantes
como Edwin Antonio Fernández explican que al costo que le representa el incremento
que deberá hacerle a sus 7 empleados se suma el aumento del precio de las
mercancías que debe adquirir “esto es una cadena, todo sube, el sueldo de los
trabajadores, los productos, la gasolina y al final el consumidor final termina
pagando todos los incrementos”.
Otro
factor que aseguran los gremios se debe tener en cuenta a la hora de fijar el
salario mínimo para el año 2017 es la carga impositiva que traerá consigo la
nueva reforma tributaria, ya que muchos impuestos subirán en su valor y otros
nuevos serán implementados.
El
porcentaje que se determine aumentar del salario mínimo será el mismo que se
aplique para el incremento de las multas de tránsito, los peajes, los trámites
ante el Estado, entre muchos otros bienes y servicios que todos los ciudadanos normalmente
afrontan en su vida cotidiana.
El
Gobierno ha advertido a través de la ministra de Trabajo Clara López que la
economía nacional ha crecido durante el presente año, pero no se puede abusar
de las proyecciones, pues se podría perjudicar la misma para el próximo año; en
otras palabras según los expertos el Gobierno ha enviado un mensaje para que el
salario básico no se incremente en un porcentaje superior al del 2016.
Si
al final se hace una suma y resta de lo que cada trabajador le aumentará el
sueldo frente a lo que tendrá que pagar demás por cada producto y servicio que
debe adquirir, el resultado será que lo que se le creció de sueldo es muy poco
para todo lo que aumentaron los valores de los alimentos, la ropa, la gasolina,
los útiles escolares, el arriendo, el transporte entre otros.