Los cambios hormonales durante el embarazo pueden conducir al insomnio.
Las mujeres embarazadas también podrían tener problemas para dormir debido a la
acidez, a tener que usar el baño con más frecuencia, o a preocupaciones sobre
el parto, explicó el grupo.
Hay formas en que las futuras madres pueden garantizar un buen sueño
nocturno. La fundación ofrece los siguientes consejos:
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Calme los nervios: Estar nerviosa por
el parto o la forma en que la vida puede cambiar con la llegada del nuevo bebé
es natural. Pero estar despierta toda la noche no ayuda. Las mujeres que se
sientan ansiosas por el parto deben intentar tomar un baño relajante o pedir a
su pareja que les dé un masaje antes de irse a dormir. Hablar sobre lo que les
preocupe o llevar un diario también podría ayudar. También evite usar la
computadora antes de irse a la cama, dado que el tiempo que pase frente a las
pantallas puede mantenerla despierta.
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Gestione la acidez: Un bebé que está
creciendo puede presionar el estómago, forzando al ácido hacia el esófago. La
incomodidad de la acidez puede impedirle dormir, pero ciertas estrategias
pueden ayudarla a gestionar esta afección. Intente consumir comidas más
pequeñas y más frecuentes para evitar llenarse demasiado en una sola ocasión.
Tampoco se acueste de inmediato después de comer, y evite la comida picante o
grasienta que empeora los síntomas de acidez.
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No vaya tanto al baño de noche: Durante el
embarazo, beber bastantes fluidos es importante. Pero si se despierta
constantemente de noche para ir al baño, intente beber más líquidos más
temprano durante el día y limitar los fluidos cuando se acerque la hora de
dormir.
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Póngase cómoda: A medida que su vientre crece
durante el embarazo, quizá sea más difícil encontrar una postura cómoda para
dormir. Las almohadas pueden ayudar, proveyendo un respaldo donde lo necesite.
Intente ponerse de lado. Entonces, coloque almohadas entre sus rodillas, debajo
del vientre y detrás de la espalda. Las almohadas especialmente diseñadas son
otra opción.
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Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor
FUENTE:
National Sleep Foundation, news release